La agricultura se define como “el arte de cultivar la tierra” proviene del latín ager, agri (campo) y cultura (cultivo). Es una actividad que se ocupa de la producción de cultivo del suelo, el desarrollo y recogida de las cosechas, la explotación de bosques y selvas (silvicultura), la cría y desarrollo de ganado.
Es una de las actividades del sector primario de cada nación, siendo el recurso más importante con el que cuenta el hombre para su subsistencia; una porción de los productos agrícolas es consumida de manera directa y otra es proporcionada a la industria para obtención de alimentos derivados, materiales textiles, químicos o manufactureros.
La actividad agrícola comenzó a practicarse en el próximo Oriente a partir de la revolución neolítica (hacia el año 7.000 a.C), junto con la ganadería; desde esos tiempos la agricultura tuvo un papel transcendental en el desarrollo de las sociedades humanas, al propiciar condiciones favorables para el paso del nomadismo al sedentarismo, con el que diera el comienzo al proceso de civilización.
Existen diversos tipos de cultivos que responden a determinadas necesidades humanas conforme el clima, subsuelo o región: el cultivo extensivo se practica en grandes extensiones de tierra y alcanza rendimientos económicos muy bajos, pero en su conjunto resultan aceptables; mientras que el intensivo se practica en espacios reducidos de terrenos, pero es más rentable y productivo. Es altamente mecanizado, y por lo general los productos que se obtienen de ésta son enviados a la agroindustria.
Entre los vegetales más importantes para la agricultura moderna destacan en primer lugar los cereales, seguidos de los tubérculos, las legumbres, las plantas azucareras, las oleaginosas, los frutales, las plantas aromáticas, las especias, y las plantas industriales.
La agricultura moderna emplea todos los recursos que proporcionan la ciencia y la técnica; en la selección de las semillas, utilización abonos químicos y sistemas de riego, protección de los vegetales contra parásitos y plagas, y adelantándose así cada vez más en la mecanización, lo cual determina un incremento continuo del rendimiento de las tierras.
La agricultura es el arte de cultivar la tierra; son los diferentes trabajos de tratamiento del suelo y cultivo de vegetales, normalmente con fines alimenticios.
Las actividades agrícolas son las que integran el llamado sector agrícola. Todas las actividades económicas que abarca dicho sector, tiene su fundamento en la explotación del suelo o de los recursos que éste origina en forma natural o por la acción del hombre: cereales, frutas, hortalizas, pasto, forrajes y otros variados alimentos vegetales.
La agricultura es la actividad agraria que comprende todo un conjunto de acciones humanas que transforma el medio ambiente natural, con el fin de hacerlo más apto para el crecimiento de las siembras.
Es una actividad de gran importancia estratégica como base fundamental para el desarrollo autosuficiente y riqueza de las naciones.
La ciencia que estudia la práctica de la agricultura es la agronomía.
TIPOS:
Según la dependencia de agua:
De secano: es aquella desarrollada sin el riego de un agricultor. De esta manera, el agua se obtiene a partir de las lluvias o el suelo.De regadío: la agricultura de regadío se caracteriza por recibir el suministro de agua a través del agricultor. Esta es aportada por medio de cauces naturales o artificiales, por ejemplo.
Según la magnitud de su producción:
Agricultura de subsistencia: su desarrollo tiene como finalidad cubrir las necesidades de un pequeño grupo de individuos, por lo que la cantidad producida es escasa.
Agricultura industrial: las cantidades producidas son inmensas ya que esta clase de agricultura se lleva a cabo con el propósito de comercializar el producto. Es característica de los países industrializados y de los llamados “en vías de desarrollo”.
De acuerdo al rendimiento y la utilización de medios de producción:
Agricultura intensiva: es típica de las naciones industrializadas, y el objetivo de la misma consiste en obtener una gran producción en un espacio relativamente reducido. De esta manera, el lugar tiende a su deterioro.
Agricultura extensiva: es practicada en una superficie amplia, por lo que el desgaste en el suelo utilizado es menor. Sin embargo, el rédito económico tiende a ser pequeño.
Según los objetivos y el método:
Agricultura tradicional: se denomina así debido a que su desarrollo es impulsado a través del empleo de métodos propios de la región donde se lleva a cabo. Este sistemas constituye una cultura del lugar por etapas prolongadas.
Agricultura industrial: bajo el propósito de obtener réditos comerciales, este tipo de agricultura se interesa en la producción de considerables cantidades de un determinado producto en un espacio y tiempo reducido.
Agricultura ecológica: a través de la confección de variados sistemas de producción se intenta conservar las características ecológicas de las zonas donde se desarrolla esta clase de agricultura, así como también la fertilidad del territorio.
Importancia de la agricultura en la Época Moderna
Durante la llamada Época Moderna el régimen Feudal se intensifica en lo que muchos llamaron su renacimiento. Es en esta etapa la importancia de la agricultura más o menos podemos asociarla con lo que hemos estado conversando hasta aquí, o sea, crecimiento de las producciones, incremento de la seguridad alimentario, creación de excedentes e intensificación del comercio, incremento de la población, desarrollo de nuevas técnicas de producción e introducción de nuevas tecnologías. Por otra parte, con el descubrimiento de nuevas tierras, a partir de los grandes viajes de descubrimiento, conquista y colonización la agricultura comenzó a ser un fenómeno global y fue posible intercambiar cultivos de una región a otra. Con ella llegaron Europa muchas especies nativas de los nuevos continentes y viceversa.
Se denomina agronomía a los saberes y las técnicas que permiten el desarrollo de cultivos. Se trata de una disciplina que, basándose en datos de diferentes ciencias, contribuye a la explotación de la ganadería y la agricultura.
La finalidad de la agronomía es optimizar los procesos que posibilitan obtener y transformar productos agropecuarios. Para esto se dedica a analizar diferentes cuestiones vinculadas a la biología, la química, la física, la sociología y la economía que, de una forma u otra, inciden sobre los diferentes procesos de producción.
Otro nombre por el que se conoce la agronomía es ingeniería agronómica, que también puede servir para denominar la carrera que se estudia en la facultad. Aunque el interés por estos conocimientos puede surgir en personas de cualquier origen, es común que las personas que nacen y se crían en el campo escojan este camino para poder heredar el negocio familiar y continuar haciéndolo crecer con las técnicas y los recursos más relevantes.
Suele decirse que la agronomía estudia los agroecosistemas: modelos de intervención humana sobre la naturaleza para obtener materias primas. Ese trabajo del hombre supone la aplicación de conocimientos teóricos y de tecnología para cumplir con sus objetivos.
Los especialistas en agronomía se conocen como agrónomos. Entre sus tareas, se encuentran incrementar la productividad del suelo, mejorar las características de las plantas y favorecer la cría de ganado. Aunque el planeta Tierra era perfecto antes de nuestra llegada, hemos explotados sus recursos a un punto tal que parece no dar abasto. Si el ser humano controlase su natalidad para evitar la sobrepoblación, como hacen todas las demás especies, no sería necesario aplicar tratamientos artificiales al suelo para llevar a cabo las tareas propias de la agricultura.
Entre la ciencia y la agronomía existe una relación imprescindible. Antes de continuar es necesario establecer la diferencia entre las ciencias aplicadas y las formales: las primeras engloban todas las aplicaciones del conocimiento científico con el objetivo de hallar la solución a problemas prácticos, basándose en tantas áreas como sea necesario; las ciencias formales, por su parte, se dedican al estudio de los procesos matemáticos y lógicos por medio del método deductivo, es decir, a todo lo que no forme parte del mundo natural y tangible.